Buenas tardes letrad@s sentad@s,
Hoy estrenamos el año 2022 con un nuevo post relacionado con una de las herramientas o técnicas que deben usarse por los mediadores en cualquier procedimiento de resolución de conflictos y, con ello, hablamos de la asertividad.
¡¡ASÍ QUE…VAMOS ALLÁ!!
En primer término, la asertividad se define como esa capacidad que poseen los seres humanos para expresar sus sentimientos, ideas u opiniones hacia los demás, de manera firme, contundente, positiva, clara y sencilla. Ello, supone una capacidad para manifestar lo que se piensa y se siente sin ofender a los restantes, buscando y preservando siempre el respeto de los derechos de uno mismo y de los demás.
Así, la persona asertiva la podremos definir como aquella capaz de expresar emociones, actitudes, deseos y opiniones de un modo positivo en cada situación social que se le presente, respetando, a su vez, esa conducta en los demás y, resolviendo de modo viable y correcto los posibles problemas que surjan.
En síntesis, la asertividad, como tal, se conforma como una expresión positiva, consciente, coherente, clara, directa y equilibrada, cuyo objeto es comunicar nuestros sufrimientos, ideas y emociones, o defender nuestros legítimos derechos, pero evitando herir o perjudicar a otros, por lo que se actúa desde un estado interior de autoconfianza, en lugar de hacerlo bajo la presión de la ansiedad, de la culpa o la rabia.

En este sentido, la técnica comentada puede ir complementada, en muchas ocasiones, de otras técnicas usadas en los procesos de mediación, como pueden ser las siguientes:
1.- MIRADA AL FUTURO: Cuando las personas se quejan, centran sus argumentos en el pasado o usan este para transmitir una mensaje negativo, la tarea de los mediadores se centra en transformar este lenguaje negativo del pasado en positivo, es decir, en asertivo para el futuro.
2.- NORMALIZACIÓN: Generalmente, las partes creen que su conflicto es único y que nadie más le ocurren situaciones análogas. Mediante este complemento, pretendemos provocar un alivio mental en ambas partes quienes, finalmente, comprender que el estado que ellos plantean ni es especial ni es único, sino que es un supuesto normal como tantos otros.
3.- MUTUALIZACIÓN: También ocurre, en mediación, que una de las partes culpa a la otra de todo lo negativo que le sucede a su alrededor, haciéndole responsable de todo lo malo que recibe. El objetivo de esta técnica pretende y busca remover a la persona que se queja, para situarla en una posición de activo colaborador en la resolución del conflicto.
En conclusión, para plantearnos un reto u objetivo para este año 2022, creo que podríamos partir del puesto de adoptar una conducta asertiva junto a los complementos que hemos expuesto. De esta manera, los diálogos, debates y/o discusiones se podrían mantener en una esfera de positividad y control que prevendría conflictos más complicados de resolver en un corto y largo plazo, dado que evitaría el malestar y el rencor entre las partes por no transmitir sus quejas o emociones de una manera que no hiera a la parte/s que tenemos enfrente.
¡¡FELICES FIESTAS Y FELIZ 2022!!